Pero el lunes, con su equipo al borde de la eliminación virtual, el segunda base dio la cara con dos batazos cruciales, incluyendo un jonrón de dos carreras en el décimo episodio que le dio a Puerto Rico su primer triunfo del Clásico Caribeño y a la vez le quitó el invicto a la República Dominicana.
"Se siente bien", dijo Navarro, quien se fue de 5-2 en el partido con ese cuadrangular decisivo, cuatro empujadas y una anotada. "Le ganamos a un equipo de Dominicana que tiene par de jugadores de renombre. Le quitamos el invicto y logramos nuestra primera victoria a la fuerza para poder seguir con vida."
El vuelacercas de Navarro en la décima entrada no hubiese sido posible de no haber sido por otro batazo bajo presión del mismo intermedista. En el octavo inning, con Puerto Rico abajo 4-2, el joven de 23 años conectó sencillo productor de dos carreras con dos outs para empatar el encuentro a cuatro anotaciones por bando.
"Queríamos el bateo oportuno y lo conseguimos", comentó Navarro, quien pertenece a los Reales de Kansas City en el béisbol de los Estados Unidos. "Siempre salgo a jugar pelota y ocurrió eso. Estoy muy agradecido con Dios."
El jonrón conectado al relevista dominicano Jailén Peguero fue un cohetazo que voló la barda del jardín derecho-central y provocó saltos y gritos de alegría en el dugout boricua y también entre la fanaticada de la Isla del Encanto, que tanto tiempo había esperado para celebrar.
"Fue un pitcheo para poder darle a la bola", relató Navarro. "No pensaba que se iba. Salí corriendo fuerte, (pensando que era) un doble o triple, pero al final se fue."
El manager de los Criollos, Pedro López, se vio aliviado al poner números en la casa por fin en esta Serie del Caribe.
"Estoy contento por los muchachos porque se lo merecen", comentó el capataz. "Rey ha sido una pieza importante para nosotros todo el año, nuestro segunda base y nuestro segundo bate. Lo que hizo esta tarde fue impresionante. Estoy bien contento por él porque se lo merece.
"Es un muchacho que se ha esforzado muchísimo a través de toda la temporada", continuó. "Dar un batazo en un stage (escenario) en que estamos ahora en la Serie del Caribe es bien importante para él."
Con marca de 1-3, Puerto Rico aún tiene mucho terreno que recorrer para aspirar a clasificar para una final como equipo de segundo lugar.
Pero cuesta arriba o no el panorama generel, la victoria del lunes les dio un respiro a los boricuas, que ahora continúan con ligeras esperanzas de dar la pelea en Hermosillo.
"En el béisbol todo es posible", dijo Navarro. "Habíamos perdido tres en línea por no contar con un bateo oportuno, pero hoy tuvimos más confianza e hicimos el trabajo."